Esta situación se le pudiera llamar Caso Ortega. Ortega era un viejo amigo que se destacó en su labor como líder, llevó su empresa a que fuera exitosa y él era un referente en su comunidad, era un líder de éxito. Una de las cuestiones que hizo Ortega para llevar su organización al éxito fue que todos los trabajadores evaluaran el liderazgo de sus líderes a diferentes niveles, incluyéndole a él.
Los trabajadores reconocieron el liderazgo de todo su equipo, excepto a uno, que posteriormente Ortega eliminó de su staff. Además de reconocerle el gran liderazgo que él tenía en la empresa y que la había llevado a un alto reconocimiento, le señalaron como crítica que él tenía que cuidar su imagen personal.
Fuerte señalamiento le hicieron y tenían toda la razón. Sin embargo, Ortega hizo caso omiso a tal señalamiento de los principales actores de su organización y al poco tiempo falleció de un infarto masivo. Con su fallecimiento, no sólo se perdió un gran líder, sino que también la empresa perdió el éxito que tenía.
¿Qué reflexiones le genera esta situación? ¿Es que la presencia de un hombre determina la continuidad de una empresa?